El aporte del sector agropecuario al producto interno bruto ha disminuido de manera constante desde hace más de 60 años, hasta llegar al 2.2% reportado en 2016, asimismo las exportaciones y la producción nacional, presentándonos situaciones críticas para diferentes rubros. Sin embargo, Más allá de subir y bajar aranceles para mitigarla, es imprescindible que contemos con una política de Estado y se asignen los presupuestos de inversiones para cumplir esa promesa e incrementar la competitividad de la agroindustria.
Tenemos un conglomerado logístico a disposición del sector, pero no hemos desarrollado la infraestructura necesaria para que el productor pueda aprovechar el hub, que actualmente no trabaja a su favor, de manera que sea posible transportar productos frescos por avión o barco eficientemente hacia su destino final. Por otra parte, la creación de un Hub alimentario en las riberas del Canal es un sueño que debemos concretar.
Conscientes de que no todo es responsabilidad del gobierno, aplaudimos a aquellos productores que han demostrado que, al realizar inversiones admirables en tecnología y técnicas innovadoras de siembra, cosecha, fabricación, empaque y logística, se logra producir más en menor extensión de terreno, con inocuidad y ahorros significativos de recursos hídricos, haciéndoles altamente competitivos.
Si bien reconocemos interés en las autoridades y hemos conocido avances en proyectos como la Cadena de Frío, estamos convencidos de que el problema que atraviesa el sector necesita una estrategia nacional definida por rubros, con la cual las buenas acciones que se emprendan trasciendan gobiernos, procurando la satisfacción del mercado local, incentivando programas de agroexportación e incrementando los aportes de este sector con tanto potencial.
Inocencio Galindo De Obarrio
Presidente CCIAP
